En honor a los patronos San Roque y San Ezequiel Moreno. Comienzan
el día 14, a las doce, con el tradicional "chupinazo",
con cuyo estallido todo el pueblo salta al unísono al compás
de pasacalles.
Se prolongan durante varios días, en los cuales se suceden
pasacalles y dianas, encierros de reses bravas, gigantes
y cabezudos, marionetas, desfile de carrozas, actos culturales,
concursos gastronómicos, torneos deportivos, fuegos artificiales,
verbenas....
El último, Día de Huelga, el pueblo se queda vacío
porque todo el mundo se va a comer al campo. Por la noche, a las
doce, el Entierro de la Cuba, con cortejo de velas
y gente enlutada, da por concluida la fiesta. Mención
especial merece la Feria Taurina, en la que se dan cita los mejores
toros y toreros del momento.